Pulsa «Intro» para saltar al contenido

Sobre la dictadura panista y amenazas de muerte

Severas críticas se observan en las redes sociales por el video e imagen de un elemento del cuerpo policiaco lavando el coche de la Presidenta del PAN Silvia Rodríguez.
Esa fotografía subida por Joel Zapata, –identificado con la corriente del tricolor– comprueba otros señalamientos hechos por la ciudadanía a este medio, donde policías de la corporación que dirige el Capitán Miguel Sánchez, recogen basura reciclable en el horario de sus labores, es decir, desatienden la esencia de sus quehaceres, en este caso la Seguridad.

De igual modo, son comunes las denuncias porque el espacio dedicado exclusivamente para las patrullas, y otro a espaldas del CEREDI o frente al Juzgado Mixto, que son prohibidos, sirven de estacionamiento a carros de panistas, cuando ciudadanos comunes que dejan allí sus autos, son infraccionados casi al instante.

Volviendo al tema de los policías, nadie alzaría la voz, sino que a la llegada del Capitán, una ola de delitos cobija al municipio, a diferencia del anterior “jefe”, que había impuesto orden hasta en locales dedicados a la venta de cerveza donde nadie pudo, por ello las exigencias del público se enfocan en que los oficiales no deben atender otras tareas ajenas a su función.

Al Director de Policía, parece importarle más quedar bien sólo con una persona, (la Alcaldesa Municipal Dulce María Montes Zúñiga) que estar comprometido con la seguridad de los ciudadanos.
Aunque es un servidor público, parece que no puede actuar de una manera distinta a como lo hacen los militares, y predomina en la Dirección un ambiente totalitario, que no permite críticas ni sugerencias.

Al parecer existe un grupo de funcionarios, quienes a la llegada a la cárcel de cualquier panista, toman atribuciones que podrían competerle al Ministerio Público.
Tal es el caso –que ya se ha mencionado antes– de conductores borrachos, detenidos durante operativos por policías del estado, de los que se evita a toda costa su consignación, con la cual podría seguirse un proceso que los dejaría con antecedentes penales por delitos que afectan a la sociedad.
El último de los casos sucedió este domingo, cuando se intentó la soltura de un conductor, aunque se informó, que el Ministerio Público venía en camino desde la capital ya enterado del asunto.

Sobre las amenazas de muerte

A más de 6 años de ejercer el periodismo regional, la Dirección de este medio se topa por vez primera con un sujeto intolerante que ya ha lanzado serias advertencias de muerte.
Esto ha sido por expresiones que el mismo sujeto comenta frente a elementos, mensajes escritos en nuestras redes sociales, conductas en nuestras oficinas donde ha dejado clara su postura de enemistad, entre otros aspectos.

Y es que desde la llegada de Miguel Sánchez, sucedió un distanciamiento con los medios impresos, cuando generalmente todos los Directores de la Policía Municipal y Estatal, consideran a la Prensa como sus principales aliados, ya sea para expresar advertencias en favor de la población o informar sobre las acciones en torno a la delincuencia.
Ahora, este señor culpa a personal de Plurinominal sobre las denuncias hechas por sus propios elementos, en cuanto a su conducta.
Un Capitán que utiliza palabras malsonantes en su vocabulario habitual, degradando así la imagen de los elementos, a los que castiga sin la menor tolerancia o toma represalias por cuestiones que tal vez no lo ameritan.

Como parte del problema se ha hecho público, el Comandante, con actitud de enfado, se ha presentado en nuestras oficinas en más de una ocasión, exigiendo los nombres de los declarantes que lo “dejan mal”, política no empleada por nuestra empresa para evitar altercados contra los elementos, aunque se cuente en nuestro poder con pruebas de los denunciantes.
Como el Director se ha preocupado por saber de donde se filtra la información, –lo que no ha logrado– esto causa en él una grave frustración que lo orilló a emitir comentarios serios contra nuestro equipo.

Al permanecer por meses bajo esta situación, recibimos esta semana mensajes anónimos de mayor intensidad, que expresan las mismas palabras empleadas por el funcionario, –aparecen casualmente debajo de comentarios contra su persona– motivo por el cual se decidió hacer pública la denuncia a través de las Redes Sociales, sobre lo que pueda ocurrirle al amenazado, su familia y bienes.

Cuando se tomó la determinación de iniciar con un medio impreso, se midieron los riesgos que esta labor implica. “No somos nuevos, pero sí de aquí”.

Nos leemos luego…

Los comentarios están cerrados.