*** Bien dicen que hay tres cosas que no pueden ocultarse: El amor, el dinero y lo p….
(Bueno. Es otro defecto que aquí no se puede escribirse como tal).
Así pues, los frutos emanados de la política son visibles en edificaciones de gente que ha ocupado el poder.
La opinión pública no quita los ojos de las viviendas que habitan funcionarios panistas de primer nivel.
Lo sea o no, el vulgo atribuye a que cualquier adquisición material deriva del sueldo logrado al adentrarse a la nómina del ayuntamiento.
Aunque no hay prueba de ello, muchos han sido los señalamientos que apuntan al desvío de recursos, pues en las últimas 3 administraciones, al final los ex funcionarios acabaron con carros nuevos, casas, propiedades, o enormes rehabilitaciones a sus domicilios.
En la actualidad, Silvia Rodríguez, Tesorera Municipal es quien se encuentra en el “ojo del huracán”.
Lo que asemeja una mansión comparada con construcciones alrededor de donde vive, parece que no puede lograrse con el sueldo que devenga.
Como se le ha visto en Tesorería por un tiempo más prolongado que el que ordena la jornada laboral, se cree que tiene “pasión” por manejar muy bien el dinero de las arcas públicas, aunque el reporte de ingresos indique lo opuesto.
Como la mayoría de ciudadanos debe limitarse cuando se trata de construir, sorprende que no hace mucho, Rodríguez haya convocado a un gran festín.
*** Otro funcionario que anda en “boca de todos”, es el director de Comercio. Ya se le vio en un vehículo blanco de modelo reciente, de la marca Chevrolet.
Por su parte, «los Neos también andan construyendo en el Zamandoque», indicaron personas de aquella zona.
Desde que Plurinominal ventiló que el secretario particular de la alcaldesa solicitó informes en Banorte para adquirir un vehículo nuevo, hasta ahora no se le ha visto cumplir su deseo.
Otro caso. Sobre la calle Pípila, un empleado municipal ya mejora la fachada de su casa, pero no es que se critique en qué gastan lo obtenido del erario público a cambio de un trabajo “honesto pero excesivo» sino que en Cerritos, al igual que en el país entero, la riqueza se ha distribuido de un modo desproporcionado, y los gobiernos han jugado un papel relevante en ello.
*** Mientras la vialidad urbana está desatendida o bien es casi nula en ciertas arterias de conflicto, el comandante de la DGSPM trae a sus elementos a la caza de borrachines en comunidades tales como el Saúz y otros puntos geográficos del municipio, al igual que en esta cabecera municipal, donde en compañía del inspector de alcoholes, al caer la noche se presentan en los expendios de cerveza y llegan al extremo de sacar con manifiesta prepotencia a los bebedores que haya en esos locales. Bajo amenazas los obligan a subir a la patrulla. En ocasiones hasta con exceso de fuerza bruta. Pero cuando alguien necesita auxilio, ni sus luces.
*** Esa corporación policiaca trata de llamar la atención al permitir el uso excesivo de sirenas. Todo el día se escuchan los alaridos de aparatos indicando urgencia, cuando se ha dicho a este medio que ha comenzado a sobresalir tal pericia para lograr un mejor desplazamiento por las calles de la cabecera.
*** Sin piedad gastan dinero público nuestras autoridades. No les basta con ser los mejor pagados de todas las administraciones de Cerritos, porque siguen derrochando a lo bruto.
En este número encontrará el lector algunos ejemplos. Le adelantamos uno: El disparatado sueldo que se paga a la Síndico Jessica Tapia y a su auxiliar.
Mientras ella se lleva al mes en sus bolsas 20 mil pesos, el foráneo Juan Ortega logra 7 mil cada 30 días.
Tal vez la administración de Dulce María Montes Zúñiga tuvo clemencia del dúo de abogados.
Como no ganan ninguna demanda laboral deben pagarse otros 12 mil pesos por “asesoría jurídica” en favor de amistades de los esposos panistas.
*** Trabajadores del área de Parques y Jardines del H. Ayuntamiento de Cerritos se trasladaron hasta Peña de Salazar para adquirir rosetones elaborados con palmito con los que adornaron la puerta principal del templo de San Juan Bautista.
¿Los gastos serían a cuenta personal de la pareja presidencial o a costa del erario público?
Justo cuándo el Papa Francisco I fustiga acremente a los hipócritas nuestras autoridades tratan de quedar bien con acciones farisaicas.
¿Será un acto de contrición para compensar el pecado de la soberbia que campea entre los funcionarios de la actual administración?
Nos leemos luego…
Enviado desde mi iPad.
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