Pulsa «Intro» para saltar al contenido

El kiosco de música de Cerritos

Por SAGRARIO SERNA.- A finales del siglo XIX en México se popularizaron los kioscos de música. En esa época al igual que hoy en día el uso de estrados o templetes eran muy necesarios, estos muchas veces eran provisionales, pero lograban su finalidad, permitir una mejor vista y mayor difusión del sonido. Pues las bandas iban adquiriendo gran importancia.
Sin embargo, este tipo de construcción según el antropólogo Rafael Ruiz tuvo su origen en el pueblo Chino, posteriormente llega a Turquía. Con la Revolución Francesa surge la idea, de que la música puede ser un medio para difundir su mensaje ideológico. Por esta razón en todos los eventos públicos de aquella época la música esta presente. Se puede decir que a partir de la Revolución Francesa, la música comienza a apropiarse del espacio urbano. Y el kiosco no es más que la concretización de esta conquista. (Ruiz,2011).

En el siglo XIX en Francia surge el movimiento de enseñanza coral, pues se creía que la música era un medio para asegurar el progreso intelectual de la nación. Es quizá a partir de entonces cuando en todo pueblo y ciudad pequeña la ubicación de un kiosco era de gran importancia. Estos generalmente en Europa se ubicaban en tres lugares: el centro de la población, jardín público, o los paseos. Algo muy parecido a lo que se haría tiempo después en México. Su ubicación final se sometía a votación por los mismos habitantes de las poblaciones.

En México se sabe que los kioscos comenzaron a ser populares en la década del 1870, algunos de los primeros que existieron en tierras mexicanas eran traídos desde Europa, principalmente de Francia, podemos imaginar que este tipo de construcciones eran deseadas por los habitantes de pueblos y ciudades, pues estas eran sinónimo de progreso y modernidad. Como sabemos en el siglo XIX, las ciudades mexicanas comenzaron a experimentar un afrancesamiento, y fue entonces cuando diversas piezas y mobiliario urbano, hecho de hierro se integraron a nuestro paisaje cotidiano.

Generalmente estos kioscos estaban hechos con hierro, pues este material era muy popular en aquella época. Como ya lo mencionamos anteriormente, la función principal del kiosco era para que diversas agrupaciones musicales hicieran sus presentaciones, por esta razón el techo del kiosco solía construirse con lámina de zinc, pues esto era similar a un megáfono para que el sonido se emitiera con buena calidad. Por tal motivo, en la actualidad existen muchos kioscos en diversos lugares públicos, pero muchas veces no sabemos cuál es la razón por la cual solían estar en medio de las plazas públicas.

El primer kiosco del que se tiene noticia en nuestro país fue inaugurado en la Plaza Mayor de la ciudad de México el 24 de diciembre de 1875, con un concierto donde alternaron varias bandas. Pero es hasta el año de 1880 que se da una fiebre de construcción de kioscos. También en esta década se dio lo que conocemos como el “movimiento verde” lo cual renovó el paisaje, pues en las plazas principales se creaban amplios jardines y se instalaban kioscos. También era común que en los patios de acceso a las fábricas se tuvieran parques a la entrada.

El kiosco de Cerritos S.L.P

En el año de 1908 Don Rafael Nieto Compeán (ilustre cerritense y responsable de la Autonomía Universitaria), gracias al cariño que siente por su pueblo natal, piensa en realizar una obra de utilidad pública, es así como forma la comisión para la construcción del kiosco de la plaza principal de Cerritos S.L.P. (Villegas, 1982:17) la cual se integra, por el primer vocal el Sr. Vicente del Castillo, como segundo vocal se nombra al Sr. Nicolás Sánchez, y quien se desempeña como tesorero es el Sr. Rafael de Ávila. Gracias a la organización y trabajo de estos ciudadanos el kiosco finalmente es inaugurado la noche del 16 de Septiembre del año 1908, para esa fecha el ferrocarril ya pasaba por Cerritos, por lo tanto se deduce que el kiosco tuvo que llegar a este municipio por medio del tren.

¿Quién fabricó el kiosco?

La fábrica del Sr. Jorge Unna fue la primera en la ciudad de San Luis Potosí, que construyó sus propias instalaciones diseñadas específicamente para su hechura, en el año de 1892, en aquel entonces los primeros talleres se ubicaban en el centro de la ciudad, pero en el año de 1903 su segunda fábrica comenzó a trabajar. (Alfaro,2010) El Sr. Unna como todo buen fabricante tomaba en cuenta el más mínimo detalle, y esa fue la razón por la cual al ver que la ciudad de la capital potosina tenía una privilegiada ubicación geográfica, se estableció aquí. Al estar localizada en el centro geográfico del país, era fácil tener comunicación con EE.UU, Veracruz y Tampico. El ferrocarril le permitió a Unna surtirse de materias primas, así como la facilidad para ofrecer sus productos en otros puntos del país y el extranjero.

Los trabajadores de esta fábrica se distinguieron por sus grandes habilidades para trabajar, muebles, vidrio, hierro etc. Antes del verano de 1892 Jorge Unna, junto a su suegro inauguraron su primera fábrica. Tiempo después él mando construir vías del tren que salían de su fábrica y se conectaban con las compañías del ferrocarril, esto nos da una clara idea del poder económico del Sr. Unna. El día 23 de junio de 1895 el entonces Presidente de México, el general Don Porfirio Díaz, visitó el estado potosino para inaugurar en el municipio de Real de Catorce las minas de Santa Ana, aprovechando esa visita Díaz fue invitado a visitar la fábrica del Sr. Unna. Eran tal la importancia de la “Gran Empresa Industrial Jorge Unna y Cía” que tiempo después se convirtió en la fábrica de muebles más importante del país (Villar,2000).

El podio y la escalera están rodeados por un barandal de hierro colado o vaciado pues esto se hacía con moldes de poca altura.

En 1900 Jorge Unna decide comprar una huerta que se encontraba en el barrio de Tequisquiapam y en ese lugar construyó una nueva fábrica que se inauguró tres años después. En estas nuevas instalaciones los departamentos quedarían más amplios y ordenados, como lo eran: cerrajería, carpintería, marmolería, vidriería, fundición de metales, etc. Esta fábrica se encargaba de la decoración completa de cualquier espacio.

Hubo varios periódicos que tuvieron la oportunidad de visitar esta nueva fábrica, entre ellos el Periódico Contemporáneo el cual describe las instalaciones de la fábrica, con fecha 23/Jun/1903, el reportero afirma que era limpia, hermosa, los jardines tenían variedad de flores, al entrar a ambos lados había dos kioscos, (Alfaro,2010). Durante un recorrido que se dio a la prensa y a distinguidos invitados los encargados de cada taller de la fábrica hicieron una breve muestra de lo que hacían en su área de trabajo, el encargado del taller de fundición se llamaba Agustín Salgado, quien tenía a su cargo un horno de fundición de alto poder, es muy probable que este señor haya sido el encargado de fundir el metal del kiosco de Cerritos.
La estructura para Cerritos tuvo que llegar a esta población gracias al ferrocarril, este medio de transporte arribó a Cerritos en el año 1890. Gracias al escritor cerritense José Alfredo Villegas Galván sabemos que su costo era de seis pesos con doce centavos, obviamente el hecho de que el ferrocarril pasara por Cerritos le dio a nuestro municipio mayor importancia a nivel estatal.

Se tiene conocimiento de que el Sr. Jorge Unna siempre empacaba con mucho cuidado todos sus productos, esto con la finalidad de protegerlos y evitar cualquier daño durante el viaje, después los enviaba por ferrocarril desarmados hasta su destino final; en aquella época esa era la única forma de enviar muebles u objetos de grandes dimensiones.

Se sabe que el kiosco de Cerritos tuvo un costo de $1,996.04 pesos, (Montejano y Aguiñaga, 1999) como ya lo habíamos mencionado anteriormente su inauguración fue en Septiembre, pero hay dos versiones; el escritor José Alfredo Villegas Galván en su libro biografía de Rafael Nieto dice que su inauguración se dio el 16 de septiembre de 1908, pero el historiador Rafael Montejano y Aguiñaga, nos dice que esta fue el 15 de septiembre de 1906. La única forma de conocer el dato correcto tal vez sería localizando los periódicos de la época. Se sabe que en aquellos años existieron algunos periódicos como El Eco del Pueblo, El Chisgarabís y Órgano de Centenario (Sánchez, 2008:21) aunque la gente de edad avanzada recuerda más el Chisgarabís quizá por el nombre que era poco común y en cierta forma gracioso, desafortunadamente nadie conservó esos periódicos, quizá también porque su tiraje era muy corto, pero si algún ejemplar impreso de estos periódicos existiera, lo más seguro es que en sus páginas se encontraría alguna nota relacionada al kiosco. Por otro lado la construcción de dicho kiosco fue también para celebrar los festejos del Centenario de la Independencia, en los primeros años de este, la banda municipal, integrada por más de 30 músicos daba conciertos cada domingo. Se sabe que tiempo después existieron dos bandas del municipio, una llamada Juventino Rosas, y otra, La orquesta XX, ambas bandas solían tener presentaciones los domingos por la tarde, e interpretaban diversos clásicos musicales de aquella época, entre ellos la famosa “Marcha de Zacatecas”.

Se sabe que el kiosco de Cerritos tuvo un costo de $1,996.04 pesos, (Montejano y Aguiñaga, 1999) como ya lo habíamos mencionado anteriormente su inauguración fue en Septiembre, pero hay dos versiones; el escritor José Alfredo Villegas Galván en su libro biografía de Rafael Nieto dice que su inauguración se dio el 16 de septiembre de 1908, pero el historiador Rafael Montejano y Aguiñaga, nos dice que esta fue el 15 de septiembre de 1906.

Gracias a una tesis que se encuentra en la biblioteca de posgrado de la facultad del Hábitat de la UASLP, elaborada por la alumna Karla López Martínez se sabe que la fábrica del Sr. Unna fue la encargada de la fabricación de este kiosco, desafortunadamente en nuestro municipio, hasta ahora nadie ha podido ayudarnos a encontrar mayor información, y cuando nos dirigimos a la biblioteca o con personal que tiene al acceso al archivo muerto nos dicen que no existe ningún documento que nos permita conocer más sobre la historia de nuestro kiosco. Lo lamentable es que la placa original del kiosco donde podría haber estado el nombre de los personajes que ordenaron esta obra, así como el nombre de la fábrica de Jorge Unna, tampoco existe, al parecer jamás sabremos si algún día existió pues al kiosco le faltan varios elementos originales que han sido sustituidos por materiales modernos. Por fortuna existe una fotografía que tiene las medidas del kiosco y el sello de la fábrica del Sr. Unna (las letras no son muy legibles).

El Kiosco de Cerritos en la actualidad

Este kiosco o templete de música, tiene una cimentación que pudiera ser de mampostería, con cadena de desplante de piedra, muros de tabique rojo recocido, recubiertos de azulejo, parte de la estructura del cuerpo inferior a base de columnas y remate superior de piedra. El cuerpo superior es de estructura metálica inclusive la cubierta, la estructura del cuerpo superior es a base de columnas metálicas, hay una columna en cada esquina de 4” aproximadamente reduciendo a 3”, en la unión de la columna con la cubierta hay una decoración con un ornamento de herrería, con un diseño de curvas, no remata una moldura, remata una aguja. Al parecer el capitel está formado de perfiles cuadrados solidos de ½ o ¾ y la cubierta parece estructurada con perfiles rolados y recubiertos con lámina lisa, y de remate una moldura tal vez metálica. El acceso al mismo se realiza por una escalinata situada perpendicularmente en la parte del frente, la cual está dividida en dos partes.
El podio y la escalera están rodeados por un barandal de hierro colado o vaciado pues esto se hacía con moldes de poca altura.
Es fácil apreciar que a nuestro kiosco le faltan varios azulejos, que se han perdido con el paso del tiempo, también algunos de sus cimientos están muy deteriorados, y está claro que a toda la barandilla le hace falta mantenimiento. Esperemos que nuestras autoridades o algún grupo de ciudadanos intenten restaurarlo, pues nuestro kiosco es un icono de nuestro municipio y fiel testigo de nuestra historia.


Bibliografía

Alfaro Cuevas, M. E. (2010). Jorge Unna Gerson, pionero del diseño industrial en México: el rescate de una empresa potosina (1889-1922). (Tesis Doctoral), UNAM, México.
Chevillot, C. (2004). Escultura de HIERRO COLADO en la Francia del siglo XIX. Artes de México, (72), 10-21.
Montejano y Aguiñaga, R. (1999). San Juan de Cerritos S.L.P (Segunda Edición. ed.): Ayuntamiento de Cerritos y San Luis Potosí.
Ruiz Torres, R. A. (2011). Los kioscos de música y las bandas de viento en México durante el Porfiriato. Antropología. Boletín Oficial del INAH(91), 47-54.
Sánchez Banda, J. H. (2008) La Revolución Mexicana en Cerritos S.L.P (Tesis de Licenciatura), UASLP, México.
Villar Rubio, J. V. (2000). El Centro Histórico de la ciudad de San Luis Potosí y la obra del ingeniero Octaviano Cabrera Hernández. UASLP.
Villegas Galván, J. A. (1982). Biografía de Rafael Nieto. San Luis Potosí, Méx. Universitaria Potosina.
Villegas Galván, J. A. (1999). Cerritos en mi recuerdo: datos históricos del municipio de Cerritos, S.L.P.

Los comentarios están cerrados.